viernes, 10 de octubre de 2014

domingo, 8 de junio de 2014

SEMANA DIOCESANA 
DE APOSTOLADO SEGLAR 2014


Charla-coloquio en VIGO, 2 de junio


Mesa redonda en REDONDELA, 4 de junio



Mesa redonda en LA RAMALLOSA, 5 de junio



VIGILIA DE PENTECOSTÉS 
en la CONCATEDRAL de SANTA MARÍA de VIGO, 7 de junio 


martes, 13 de mayo de 2014

MENSAJE DEL PAPA FRANCISCO
a la Acción Católica 2014

Queridos amigos de la Acción Católica,
El tema de su Asamblea “Personas nuevas en Cristo Jesús, corresponsables de la alegría de vivir”, se inserta bien en el tiempo pascual, que es un tiempo de alegría. Es la alegría de los discípulos en el encuentro con Cristo resucitado y esta alegría, necesita ser interiorizada, dentro de un estilo evangelizador capaz de incidir en la vida. En el actual contexto social y eclesial, ustedes, laicos de la Acción Católica son llamados a renovar la elección misionera, abierta a los horizontes que el Espíritu indica a la Iglesia y expresión de una nueva juventud del apostolado laical. Ésta es una elección misionera: todo en clave misionera. Todo. Es el paradigma de la Acción Católica: el paradigma misionero. Ésta es la elección que hoy hace la Acción Católica. Sobre todo las parroquias, especialmente aquellas marcadas por el cansancio y la cerrazón, y hay tantas. Parroquias cansadas, parroquias cerradas… ¡hay! Cuando yo saludo a las secretarias parroquiales, les pregunto: ¿pero usted es secretaria de aquellas que abren la puerta o de aquellas que cierran la puerta? Estas parroquias necesitan de su entusiasmo apostólico, de su plena disponibilidad y de su servicio creativo. Se trata de asumir el dinamismo misionero para llegar a todos, privilegiando quien se siente lejano y a los estratos más débiles y olvidados de la población. Se trata de abrir las puertas y dejar que Jesús pueda salir. ¡Tantas veces tenemos a Jesús encerrado en las parroquias con nosotros y nosotros no salimos y no dejamos que Él salga! ¡Abrir las puertas para que Él salga, al menos Él! Se trata de una Iglesia “en salida”: siempre una Iglesia en salida.
Este estilo de evangelización, animado por una fuerte pasión por la vida de la gente, está particularmente adaptado a la Acción Católica, formada por el laicado diocesano que vive en estrecha corresponsabilidad con los Pastores. En esto les es de ayuda la popularidad de su Asociación, que a los compromisos infra eclesiales, sabe unir aquellos de contribuir a la transformación de la sociedad para orientarla al bien.
He pensado en entregarles tres verbos, tres verbos que pueden constituir, para todos ustedes, un tramo de camino. El primero es: permanecer. Pero no permanecer cerrados, no. Permanecer, ¿en qué sentido? Permanecer con Jesús, permanecer gozando de su compañía. Para ser anunciadores y testigos de Cristo se necesita permanecer sobre todo cercanos a Él. Es a partir del encuentro con Aquel, que es nuestra vida y nuestra alegría, que nuestro testimonio adquiere, cada día, un nuevo significado y una fuerza nueva. Permanecer en Jesús, permanecer con Jesús.
Segundo verbo: ir. Por favor, jamás una Acción Católica inmóvil. No detenerse: ¡avanzar!Ir por las calles de sus ciudades y de sus países y anunciar que Dios es Padre y que Jesucristo se los ha hecho conocer, y por esto su vida ha cambiado: se puede vivir como hermanos, llevando dentro una esperanza que no desilusiona. Que haya en ustedes el deseo de hacer llegar la Palabra de Dios hasta los confines, renovando así su compromiso de encontrar al hombre en cualquier lugar se encuentre, allí donde sufre, allí donde espera, allí donde ama y cree, allí donde están sus sueños más profundos, las preguntas más verdaderas, los deseos de su corazón. Allí, los espera Jesús. Esto significa: salir afuera. Esto significa: salir.
Y finalmente, alegrarse. Alegrarse y exultar siempre en el Señor. Ser personas que cantan a la vida, que proclaman la fe. Esto es importante: no sólo recitar el Credo, recitar la fe, conocer la fe: proclamar la fe. Decir la fe, vivir la fe con alegría se llama "cantar la fe”, y esto no lo digo solo yo. Esto lo dijo hace 1600 años San Agustín: cantar la fe. Personas capaces de reconocer los propios talentos y los propios límites, que saben ver en las propias jornadas, también en aquellas más oscuras, los signos de la presencia del Señor. Alegrarse, porque el Señor los ha llamado a ser corresponsables de las misiones de su Iglesia. Alegrarse, porque en este camino no están solos: está el Señor que los acompaña, tienen tantos obispos y sacerdotes que los sostienen, están sus comunidades parroquiales, sus comunidades diocesanas con las cuales compartir el camino. No están solos. Con estos tres comportamientos, permanecer en Jesús, ir a los confines y vivir la alegría de la pertenencia cristiana, podrán llevar adelante su vocación y evitar la tentación de la “quietud”, que no tiene nada que ver con el permanecer en Jesús, evitar la tentación de la cerrazón y aquella del intimismo, tan edulcorada, desagradable por más dulce que sea, aquella del intimismo… Y si ustedes “van adelante”, no caerán en esta tentación. Y también evitar la tentación de la seriedad formal. Con este permanecer en Jesús, ir a los confines, vivir la alegría evitando estas tentaciones, evitarán de llevar adelante una vida más parecida a estatuas de museo que de personas llamadas por Jesús a vivir y a difundir la alegría del Evangelio. Si ustedes quieren oír el consejo de su asistente general, es tan manso, porque lleva un nombre manso, es Mansueto. Si ustedes quieren seguir su consejo, sean como burritos, pero jamás estatuas de museo, por favor, jamás.
Pidamos al Señor para cada uno de nosotros, ojos que sepan ver más allá de la apariencia, orejas que sepan oír los gritos, susurros y también los silencios, manos que sepan sostener, abrazar, cuidar. Pidamos sobre todo un corazón grande y misericordioso, que desea el bien y la salvación de todos. Los acompañe en el camino María Inmaculada y también mi bendición.
Les agradezco porque sé que rezan por mí. Ahora los invito a rezarle a la Virgen, que es nuestra Madre, y que nos acompañará en este camino. La Virgen siempre iba detrás de Jesús, hasta el final: lo acompañaba.

Recémosle que nos acompañe siempre en nuestro camino, este camino de la alegría, este camino del salir, este camino del permanecer con Jesús. Ave María…

Papa Francisco

domingo, 9 de marzo de 2014



Los fieles Laicos son protagonistas en la obra de evangelización.

2014-03-08 Radio Vaticana
(RV).- “Los fieles laicos, en virtud del Bautismo, son protagonistas en la obra de evangelización y promoción humana”: lo escribe el Papa Francisco en un Mensaje para el Encuentro de responsables de las agregaciones laicales eclesiales y de inspiración cristiana, promovido por la Diócesis de Roma sobre el tema “La misión de los laicos cristianos en la ciudad”, desarrollado en la Pontificia Universidad Lateranense. “Incorporado a la Iglesia, miembro del Pueblo de Dios – subraya el Papa - es inseparablemente discípulo y misionero. Es siempre necesario volver a partir de esta raíz común a todos nosotros, hijos de la madre Iglesia (cfr Evangelii gaudium, 120).
Como consecuencia de esta pertenencia común a la Iglesia y la participación a su misión - explica - es importante no contraponer entre ellos a las parroquias y las agregaciones eclesiales laicales. Estas últimas, en su variedad y dinamismo, son un recurso para la Iglesia, con su proyección en los diversos ambientes y sectores de la vida social; pero es bueno – observa Francisco – que mantengan un lazo vital con la pastoral orgánica de las diócesis y de las parroquias, para no construirse una lectura parcial del Evangelio y no desarraigarse de la madre Iglesia (cfr ibid., 29)”. El Obispo de Roma, pensando en la misión de los laicos cristianos en la ciudad “en contacto con las complejas problemáticas sociales y políticas”, los invita a “hacer uso habitual del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, un instrumento completo y precioso. Con la ayuda de esta ‘brújula’ – afirma - los aliento a trabajar por la inclusión social de los pobres, teniendo siempre para ellos una prioritaria atención religiosa y espiritual (cfr ibid., 200)”. (RC - RV)

lunes, 3 de marzo de 2014

Decálogo para la renovación de la Iglesia en España,
Tomado de "Religión Digital" a propósito del discurso del Papa Francisco a los Obispos Españoles, 3 de marzo de 2014

1.-"Abrir caminos nuevos al Evangelio", sin contentarse con lo de siempre. Innovación y creatividad. Avanzar sin miedos. 
2.- Una actitud de "escucha atenta a todos", de "corazón a corazón", buscando siempre lo que une y no lo que separa. 
3.- Los obispos y todos tenemos que poner en práctica sobre todo estas cuatro virtudes: humildad, paciencia, ternura y misericordia.
4.- Además, los obispos no pueden ser señores, sino pastores que confían en "la grey", porque ésta "tiene olfato para las cosas de Dios". La grey conformada por curas, religiosos y laicos.
5.- Una Iglesia pueblo de Dios, donde los laicos, desde las más variadas condiciones de vida y respectivas competencias, han de llevar adelante el testimonio y la misión de la Iglesia 
6.- Una Iglesia en estado de misión, dedicada no sólo a conservar lo que ya tiene, sino volcada en ir a buscar a los "alejados", a las ovejas perdidas. Una Iglesia consciente de que "la fe no es una mera herencia cultural".
7.- Una Iglesia que cuide especialmente la transmisión y la educación de la fe de los niños. Porque la infancia es la patria de la vida y, si el misterio de Dios entra en el alma en esas edades primeras, permanece para siempre.
8.- Una Iglesia volcada en el acompañamiento de las familias, como espacios de amor, de vida y de fe. Ofreciendo este caudal de virtud a la sociedad, sin querer imponer el modelo matrimonial católico como el único y exclusivo.
9.- Una atención "prioritaria" a las vocaciones sacerdotales y religiosas
10.- Y por último, pero siempre como primero en la agenda papal, "el servicio a los pobres" de una Iglesia que "es madre y nunca puede olvidar a sus hijos más desfavorecidos".